Lo más llamativo que ha ocurrido en os últimos meses ha sido la irrupción primero de Vicky Alonso y después de Julia Zambudio, que han causado un terremoto en el escalafón de los jockeys patrios.

Para empezar, creo que la denostada rebaja en el peso ha sido un éxito total, ya que sin la descarga ninguna de las dos habría tenido oportunidad de demostrar su potencial y desde que Jaime Gelabert empezó a montar no hemos tenido a nadie tan prometedor como a ellas dos. Si vemos que no sale nadie en los próximos años habría que repensarse el implementar el descargo de nuevo, aunque ponga el hándicap patas arriba, ya que necesitamos nuevas fustas con urgencia.

Un tema que me preocupa es la efervescencia en las redes respecto a ellas - supongo que en persona será peor-, la verdad es que Vicky me preocupa menos ya que tiene un entorno que sabe de que va esto, su padre nunca ha recibido el apoyo que ha merecido como preparador y conoce la cara ingrata de nuestro mundo, pero con Julia me saltan todas las alarmas, por lo poco que he hablado con ella creo que tiene la cabeza en su sitio, por como monta desde luego lo parece, pero ya llevo unos años en esto, he visto muy buenos proyectos de jockeys perderse y me da la impresión que se están dando las circunstancias para que ello pase.

Vicky ya está en el paso de aprendiz a Jockey que es el momento más difícil en la vida de un jockey, ya que al perder el descargo muchos preparadores abandonan al jockey y se buscan un nuevo descargo, este momento si no se tiene padrino- que ninguna de las dos lo tiene- sólo se pasa con carácter y trabajo, estoy convencido de que ambas lo pasarán.

En el hipódromo se vive todo a máximos, la mesura no va con nosotros, cuando alguien está en la cresta de a ola todo son parabienes y adulaciones, cuando se pasa una mala racha inmediatamente surgen los detractores anunciando que estas acabado y nuestros jóvenes jockeys están sometidos a ambos en un periodo muy corto de plazo.

Ahora la ola de emoción con Vicky ha bajado, lo cual es curioso ya que sigue montando igual de bien que antes y se ha trasladado a Julia que ahora mismo es lo más y es en este momento cuando se han perdido muchos prometedores jinetes, ya que cuando todo el mundo te dice lo buena que eres y que todo lo que haces es maravilloso es muy difícil sustraerse de ello y seguir mejorando.

 Ambas son proyecto de jockeys, necesitan montar y aprender para poder desarrollar su potencial, es difícil ser humilde cuando tienes el viento soplando a favor y lo que suele pasar es que lleva a un estancamiento profesional, si miramos atrás veremos que este es un destino común para los jóvenes talentos, no todos superan este obstáculo, algunos caen en el estancamiento y luego reaccionan, pero muchos se quedan en el camino.

La verdad es que no detecto estancamiento en ninguna de las dos, pero cuando veo en las redes la emoción que despiertan me aterrorizo, a los generales romanos que conseguían una gran victoria se les concedía un triunfo, que era un desfile junto a sus tropas por la ciudad de Roma, el general marchaba en el carro triunfal con un esclavo que sostenía la corona de la victoria sobre su cabeza y le susurraba al oído Memento Mori ( recuerda que eres mortal) , para que no se le fuera la cabeza, espero que tengan a alguien que les diga que son humanas, que sólo están al inicio de su carrera, les queda mucho por mejorar, que llegarán momentos perores, que tocará apretar los dientes y pelear, a ambas las veo posibilidades de entrar en el podio de nuestros jockeys, pero sólo hay un camino que es trabajar , aprender de los errores y no repetirlos, sin escuchar el runrún que generan, hay que disfrutar el momento, pero no dejarse llevar por él, ya que si bien los comentarios son bienintencionados, son peligrosos cantos de sirena si uno se deja llevar por ellos.